La nueva serie Yamaha DTX6K nos ofrece tres modelos de baterías electrónicas en un diseño compacto para cualquier batería que quiera aprender o tocar como un profesional al poder aplicar técnicas de batería acústica con sonidos reales.
El módulo de sonidos que incluye es el DTX-Pro con 40 presets de batería, más 200 para guardar tus propias configuraciones, 712 sonidos y efectos. Los sonidos de batería se han grabado en algunos de los mejores estudios de grabación para captar la esencia del ambiente y hasta el más mínimo detalle de interpretación. Para modificar los kits y crear nuevas versiones te podrás ayudar de tres controles, ambiente, compresión y efecto con un amplio margen de posibilidades de tonos. Por ejemplo, con el ambiente controlas la naturalidad y la reverberación del kit mientras que la compresión y el efecto utilizan el conocido 1-knob, ya visto en otros productos de Yamaha de la gama PA, para tener desde una compresión sútil a una extremadamente presente o manejar la mezcla del procesador de efectos interno. Estos procesadores son totalmente configurables teniendo disponibles una larga lista de efectos a añadir.
Este módulo cuenta con USB para enviar y recibir datos MIDI o conectarse a un ordenador para reproducir audio, MIDI Out para enviar datos MIDI a los dispositivos que tenga conectados y hasta 14 entradas para pads o triggers pudiendo así aumentar la configuración de la batería y crear un set híbrido que mezcle la batería acústica con la electrónica.
Lo más importante en este tipo de instrumentos, además de su sonido, es conseguir reproducir el comportamiento y la respuesta de una batería acústica para que el batería se pueda sentir cómodo y aplicar técnicas para hacer más realista su interpretación. Para ello, han diseñado los pads con material TCS, textured cellular silicone, que contiene miles de burbujas de aire para poder conseguir una sensación de toque muy natural y realista, para golpear fuerte sin que la superfície pierda fuerza. Además, tiene una estructura flotante para no tener contacto entre las partes evitando así que las vibraciones se puedan transmitir con lo que también se mejora la sensibilidad del pad.
Sus pads de caja, ride y crash, éste último disponible en los modelos más avanzados, están equipados con tres zonas de uso y los platos se pueden mutear o apagar para aplicar técnicas muy precisas. El pad de ride también tiene un sensor posicional para ofrecer diferentes sonidos dependiendo de la zona en la que se esté tocando.
Por último, cabe destacar su amplificador de auriculares con una precisión alta y una distorsión y ruido muy bajo para poder practicar en silencio disfrutando igualmente de una gran calidad de sonido.
Los tres modelos que forman esta serie son la Yamaha DTX6KX la más sencilla con pads de goma para los toms y el floor tom, caja XP80 con la estructura TCS, pad de bombo KP65 de 5 pulgadas compatible con pedales dobles, hi-hat HH65 con controlador, pad de Crash de 10 pulgados con función de apagado y el ride PCY135 de 13 pulgadas y tres zonas. El siguiente modelo es la Yamaha DTX6K2X que incluye tres pads de plato PCY135, dos crash y un ride, el pad de bombo KP90 y el hi-hat RHH135 de dos zonas y, por último, la potente Yamaha DTX6K3X, donde todos los pads de tom y caja tienen parches TCS para captar mejor cada uno de los golpes.